Entrega de trofeos |
Bucaramanga, Agosto 12 de
2015.- Luego de tres meses de competencias, en las que participaron más de 400
deportistas de las 36 veredas que conforman el Bajo Simacota, los Juegos por la
Paz llegaron a su final.
El evento dejó un balance
positivo, a propósito de la recuperación de algunas justas que desde hacía 10
años habían desaparecido como consecuencia del conflicto armado.
En Puerto Nuevo el colorido de
la ceremonia de clausura, los equipos finalistas dispuestos para luchar por el
título y la comunidad brindando su apoyo, fueron el mejor marco para la
finalización de estos juegos que sin lugar a dudas son el renacer de un nuevo
espacio de integración y confianza entre las diferentes veredas, que cada
semana se unían en torno al deporte.
Luis Alfonso Aparicio Reyes,
director Territorial de la Unidad para la Atención y Reparación Integral,
reconoció ante los asistentes el esfuerzo y expresó: “El ejemplo que ustedes han dado
hoy, no es solo para el municipio sino para todo el país, porque por medio del
deporte podemos construir tejido social, queremos felicitarlos por esas ganas
que le pusieron a los diferentes encuentros deportivos que hoy culminan con
éxito”.
Del mismo modo, la alcaldesa
de Simacota, Marcela del Pilar Arce Hernández, reconoció la labor de la Unidad
para las Víctimas y el compromiso con la región del Bajo Simacota: “Gracias por
permitirnos a los simacoteros disfrutar de los beneficios de esta ley de
víctimas, un trabajo de más de tres años con las comunidades. Este trabajo que
ustedes han hecho no tiene precio y solo lo podemos pagar con la gratitud de la
comunidad que hoy queda satisfecha y quedará en la historia del departamento y
del país”.
Héctor Pinzón Bayona, tejedor
de la estrategia 'Entrelazando' no ocultó su emoción al ver hecho realidad esta
medida de reparación propuesta por ellos: “Gracias a la Unidad para las
Víctimas, a los tejedores mis compañeros con quienes hace tres años empezamos
esta estrategia para reconstruir el tejido social y de verdad que hoy me siento
feliz porque el trabajo que se ha hecho lo veo representado en ustedes deportistas”.
De este modo, la comunidad del
Bajo Simacota encontró en sus Juegos por la Paz el mejor espacio de
reconstrucción del tejido social y es el impulso para la realización de las
siguientes versiones de estos juegos que son parte del patrimonio de los
simacoteros. Fuente: Prensa de la UARIV
(Ángel René Vargas Cabrera)